El gestor de cuidados resuelve la pérdida de servicios de un afiliado

Malaika estaba en un programa de rehabilitación diurna en Mount Sinai West, pero cuando llegó la pandemia, su programa se cerró, y su familia no sabía cómo conseguir que volviera al programa.
"No apreciábamos toda la documentación que estaban haciendo por Malaika", dice su padrastro, Raymond. "Así que ahora nos tocaba a nosotros hacerlo".
Por su cuenta
Esto dejó a los padres de Malaika solos para ponerla en contacto con los servicios que necesitaba. Además, había una desconexión en la financiación de Malaika. Todo lo que sus padres intentaban presentar para su cuidado era rechazado. "Fue entonces cuando nos resignamos a que Malaika no participaría en ningún programa. Casi nos rendimos", dice Raymond.

Entonces Jessica fue asignada al caso de Malaika. Según la familia, Jessica era como una detective. Examinaba todos los detalles e investigaba lo necesario para resolver el problema de por qué Malaika parecía estar pasando desapercibida.
"Por eso queremos tanto a Jess", comentó Raymond. "Nos llevó de la mano durante todo el proceso y nos consiguió la información adecuada".
Encontrar la solución
Jessica examinó los expedientes de Malaika y se dio cuenta de que Medicaid no había tramitado servicios como el alojamiento diurno. Pudo ayudar a los padres de Malaika a enviar la información correcta a Medicaid, lo que permitió que Malaika recibiera de nuevo la aprobación para su estancia diurna.
Ahora que Malaika ha vuelto a su programa, sonríe y se ilumina cuando ve a Jessica. Jessica se comunica con Malaika mediante el lenguaje de signos, lo que le da libertad para comunicar sus necesidades directamente.
"Malaika está consiguiendo expresarse de nuevo, y ahora que está en su horario habitual, ha recuperado su vida", dijo Jessica. "Trabajar con Malaika ha sido una de las mejores experiencias que he tenido trabajando en ACANY".